¿Alguna vez has oído un ruido, volteas y te das cuenta de que no hay nada que lo produzca? ¿O seguramente has visto algo que nadie más ve? De seguro has oído que alguien te llama pero no hay nadie contigo. Eso le pasa a todos, pero, ¿por qué?
La Física dice que además de este, hay otros universos. Y muchos de ellos en algún momento se intersectan con el nuestro. Eso no parece de mucha importancia para ti o para mi, si no fuera porque estos universos, imperceptibles para nosotros, están habitados. Están habitados por seres etéreos. Seres que, así como pueden tener buenas intenciones para quienes vivimos en este plano dimensional, tambien los hay cuyas intenciones son completamente opuestas. Desafortunadamente para nosotros son estos últimos quienes tratan de entrar a nuestro universo con más frecuencia.
Estos entes malignos no pueden manifestarse del todo en nuestra realidad. Ellos sólo pueden tocar nuestro plano dimensional, a veces no llegan ni a aproximarse a él, pero sólo eso basta para que interfieran en nuestras vidas. O en nuestras muertes.
Cuando tocan o rozan nuestro mundo tridimensional, las moléculas en el aire vibran. Lo hacen en frecuencias tan bajas, conocidas como infrasonido, que no podemos oír dichas vibraciones. Al menos no conscientemente. Nuestro cerebro opera en frecuencias similares a las de esas vibraciones. Es entonces cuando las vibraciones sincronizan los procesos cerebrales de tal manera, que comenzamos a sentir cosas que no existen. Cosas como voces, luces, sombras, presencias. Y en un grado más profundo, tristeza, miedo, locura, maldad, pesadillas...
Las ondas binaurales y los mensajes subliminales replican esas sensaciones, pero rara vez sus horribles consecuencias.
Cuando sientes voces que dicen que hagas el mal, son estos entes extradimensionales malévolos quienes te lo susurran al oído. Cuando oyes que dicen tu nombre, sin que haya nadie más contigo, es que ya te escogieron. Cuando tienes pesadillas, son ellos quienes las proyectan en la pantalla de tu subconsciente. Cuando por la noche ves una sombra escurridiza, es que vienen de visita. Cuando sientes que alguien te observa, o que está detrás tuyo, son ellos. No te molestes en voltear, tú no puedes verlos, pero ellos a ti sí.
Expertos dicen que cuando un sujeto se convierte en psicópata, todo se origina en su mente, pero yo creo que se equivocan. La gente llama a estos seres demonios o fantasmas. Pero son más que eso.
¿Qué quieren lograr con esto? Volvernos locos, acabar con nuestra cordura, hacernos sentir miedo, miseria, depresión. Provocar que nos dañemos o matemos a nosotros mismos. Lo hacen sólo para divertirse. Para alimentarse de lo malo que nos provoca lo que ellos siembran en nuestras mentes, y de lo que cosechan de nuestras acciones desencadenadas por eso mismo que siembran. No se detendrán hasta destruirnos.
Lamentablemente no se les puede detener, ni siquiera esconderse de ellos. Son como Dios, pero son malos. Tampoco vale la pena suplicar su piedad, a ellos no les importamos.
Sólo espera que no te escojan como su juguete. Ellos prefieren a las personas sensibles, cuyas mentes frágiles pueden sucumbir a su influencia, y que pueden ser fácilmente manipulables.
Si eres de esas personas y comienzas a percibir cosas inexistentes, entonces estás perdido.
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